Dirección del coche
El sistema de dirección y suspensión de su vehículo cumple muchas funciones importantes. Te protege de golpes y superficies irregulares. Evita que los componentes importantes del lado inferior entren en contacto con la carretera. Y, por último, le permite dirigir su automóvil o camioneta hacia donde quiere que vaya.
En un sistema de piñón y cremallera asistido por potencia, un cilindro conectado al bastidor contiene fluido hidráulico que ejerce presión sobre uno u otro lado. Esto hace que el vehículo sea más fácil de conducir. Mientras tanto, el chasis, los puntales y los neumáticos del vehículo lo sostienen y brindan una experiencia de manejo uniforme y cómoda.
Todos estos componentes están diseñados para funcionar bien juntos durante años. Con el tiempo, pueden comenzar a romperse, sin embargo, causando una variedad de problemas que pueden comprometer la calidad de su viaje e incluso su seguridad. Echemos un vistazo a algunas de las señales de advertencia más comunes de los problemas de dirección y suspensión.
Problemas más frecuentes
Continuar rebotando después de golpear un bache o un bache: su vehículo subirá o bajará cuando llegue a un punto alto o bajo en la carretera, pero debería volver inmediatamente a una conducción suave. Si no es así, la causa más probable es el uso de amortiguadores o puntales, o en algunos casos, un resorte de hoja dañado.
La dirección parece deslizarse al mantener el volante en una posición girada: el líquido de dirección bajo, la correa de la bomba de la dirección o los componentes del bastidor de la dirección desgastados o dañados pueden causar esto.
El volante requiere un gran esfuerzo para girar: esto puede deberse a que la bomba de la dirección asistida funciona mal, a un bastidor de la dirección con fugas o al líquido de la dirección de baja potencia.
El volante de dirección rebota hacia arriba y hacia abajo mientras viaja a velocidades de autopista o al frenar, esto puede ser causado por una serie de cosas diferentes. Sus ruedas pueden estar fuera de equilibrio. Sus neumáticos podrían estar desgastados o inflados incorrectamente. Incluso podría tener pernos de rueda sueltos o problemas con sus rotores de freno.
El “volante” del volante: si observa que su vehículo se balancea de un lado al otro cuando gira el volante, es posible que tenga cojinetes de puntal o varillas de acoplamiento defectuosos. Los montajes de cremallera de dirección rotos o rótulas desgastadas también causan este problema.
Un sonido fuerte de chirridos o silbidos al girar el volante, a menudo es una señal de que la correa de la bomba de la dirección está suelta o desgastada. También puede indicar problemas con la propia bomba de dirección.