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Consejos para mantener un coche diésel

En 1893 Rudolf Diésel dio el nombre a la idea de encontrar un rendimiento térmico superior a través de un combustible volátil alternativo, el fuel oil. La principal diferencia con los motores de gasolina es que los diésel no necesitan chispa para encenderse, sino que cuentan con bujías incandescentes que van subiendo la temperatura de la cámara de combustión para mejorar el arranque en frío y aprovechan ese calor una vez alcanzada la temperatura óptima. Es por ello que, este tipo de motores, se utilizan cuando se requieren grandes potencias como las empleadas para mover barcos, locomotoras, vehículos de carga o generadores de gran capacidad.

Es cierto que los niveles de contaminación en un motor diésel son superiores a los de la gasolina, sin embargo, en la actualidad se están desarrollando mayor número de tecnologías y avances lo que lo hacen más atractivo para su compra. Aconsejamos la adquisición de un vehículo de motor diésel cuando tenemos un hábito de conducción de muchos kilómetros ya que son maquinarias más duraderas al sufrir menos desgastes y menos revoluciones.

Cómo mantener tu coche diésel en perfecto estado

  1. No dejes el mantenimiento y respeta siempre los plazos de revisión de aceite o recambios que indique el fabricante.
  2. Si durante los últimos 5-10 minutos has circulado por autopista o has subido a un puerto de montaña, no te recomendamos que apagues el motor de forma rápida y brusca, ya que el aceite puede acumularse en la turbina, carbonizarse y romper el turbo.
  3. No apures al máximo el depósito de combustible es decir, intenta repostar antes de que la aguja del nivel de carburante baje por lo menos a un cuarto del depósito. De esta forma, las impurezas del carburante no se acumularán en el fondo llegando a afectar el sistema de alimentación o los inyectores. Relacionado con el repostaje, no repostes si ves que en la gasolinera hay algún camión cisterna rellenando sus tanques ya que las partículas de impurezas o humedad podrían entrar en tu vehículo afectando al sistema de inyección.
  4. Vigila especialmente el nivel de aceite, siempre con el motor en frío y llano.
  5. Espera a que el motor de caliente ¿sabes cómo hacerlo?  si tu motor está frío, aguanta unos 10 segundos al ralentí antes de comenzar a circular, sobre todo en invierno.
  6. Purga el filtro de gasoil para intentar eliminar la máxima de humedad que pueda contener el carburante; y sustitúyelo cada 60.000 kilómetros como máximo.
  7. En cuanto a tu forma de conducción, también puedes hacer algo para mimar lo máximo posible tu motor diésel. Procura circular por debajo de 2.000 rpm, de esta forma alargarás la vida de la válvula EGR del catalizador.
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